Podemos saber que ya se daba la elaboración del vino desde hace siglos, porque hay datos que aseguran su existencia. Lo que nos asegura que la producción de esta deliciosa bebida ya se hacia en esos años, de manera muy artesanal. Se empleaban odres de barro para conservar el vino, pero estos no lograban aislar el preciado líquido de su interior, de los múltiples factores externos que ponían en riesgo su durabilidad.
El proceso de elaboración del vino es un arte, por la manera en que la vid debe de ser cultivada. También los cuidados que el fruto y el mosto debe ser especificos para logran un buen vino. Si se echa un vistazo a las bodegas vinícolas de la actualizad, se hace difícil imagina como hacían hace 500 años para obtener un buen vino.
Con la implementación de la tecnología se hace más fácil el cuidado de las plantas, la recolección de la uva y la vinificación. Las bodegas usan equipo mecánico para la recolección de las bayas; aunque, en algunas bodegas más tradicionales mantiene la recolección de manera manual para no afectar la uva por el trato tosco de una máquina.
Cosecha de la uva
En cada lugar del mundo la vendimia se hace en diferentes meses del año. Lo más importante es que el invierno haya sido lo suficientemente frio como para permitir el descanso de la plata, y que el verano sea lo suficientemente caliente como para que el fruto se madure de forma adecuada.
Es importante tomar en cuenta que los diferentes tipos de suelos pueden afectar la productividad de la vid y las notas del vino. Es recomendado la plantación de vitis vinífera en suelos con buena filtración de agua, pero que no sea grande como para que la planta no pueda hidratarse.
La cosecha se hace diferente dependiendo de las bodegas y los objetivos que tienen para el producto final. Por lo general las bodegas que cosechan con maquinaria, lo hacen para la producción de vino de mesa. Las maquinas suelen romper los hollejos de las uvas, generando desperdicio y una fermentación temprana de algunas frutas, lo que dificulta el control del proceso de fermentado.
Las bodegas de mucha tradición realizan la vendimia a mano para cuidar al máximo la fruta; la transportan en canastas en las que ponen solo unos cuantos kilos, y las transportan del campo a la bodega con el mismo cuidado.
Hay algunos casos curiosos de vendimias como; el de algunos pinot grigios que lo cosechan en la noche, con el fin de mantener su frescura. Está el caso de los vinos biodinámicos, que se cosechan en una alineación de planetas específicos. También se encuentran algunos que solo se vendimian en las noches de luna llena.
Elaboración del Vino: Fermentación del mosto
Cuando toda la cosecha se encuentra en la bodega, se procede al macerado. En esta parte del proceso las uvas son puestas en un tanque de acero inoxidable; soy prensadas suavemente para romper su piel y extraer el mosto (jugo de uva). En esta parte del proceso encontramos una distinción entre los vinos blancos y los vinos tinto.
Elaboración del Vino tinto
En el vino tinto, se maceran las uvas para extraer el mosto, en el mismo tanque se agregan las levaduras que consumieran toda la azúcar de la uva y la convertirán en alcohol. En este proceso de fermentación se encuentra el hollejo en todo momento en contacto con el mosto; esto con el fin de que el hollejo aporte su pigmentación y los taninos. Luego del proceso de fermentación, el vino es embotellado o pasado a barricas de roble para su envejecimiento.
Elaboración del Vino Blanco
En el vino blanco; se macera la fruta, el mosto es llevado a otro tanque de acero inoxidable donde es fermentado por separado de los hollejos, de esta manera el vino no aporta color, ni taninos. Luego de este proceso el vino es embotellado y envejecido en tanques de acero inoxidable o barricas de roble.
¿Se puede hacer vino blanco a partir de uvas tientas?
Si se puede, solo se debe de separar el mosto de los hollejos antes de la fermentación.
Elaboración del Vino Rosé
Posiblemente en este punto ya te imagines como es la fermentación en el vino rosado. En el mismo tanque en el que se hace la maceración, se inicia la fermentación. En algún punto de este procesos, se extrae el mosto para que termine su fermentación separada de los hollejos. De esta manera se pueden producir vinos frescos y con una leve carga tánica, y por supuesto con su color característico. La profundidad de su color va a depender en cuanto tiempo estuvo el mosto en contacto con los hollejos.
Sigue aprendiendo sobre vinos
Aún falta mucho que explorar en el mundo del vino. Pero si sigues adelante leyendo las publicaciones del blog de la Vinoteca Sommeleir, te convertirás en un conocedor del vino. Disfrutaras cada copa de este glorioso elixir que tomes. Pero aún más importante aprenderás a reconocer cuales vino son los que más te gustan. Recuerda, la única manera de aprender de vinos es probando y leyendo nuestro blog